El Sistema de Lanzatorpedos (TLS) de SEA ha sido elegido para formar parte de un ambicioso programa de fragatas en América Latina, consolidando aún más su posición como una opción preferida por marinas internacionales, incluidas la Real Armada del Reino Unido y otras destacadas fuerzas navales en regiones como América del Norte y el Sudeste Asiático.
Con más de 30 años de servicio en la Real Armada Británica, el TLS de SEA es reconocido por su flexibilidad, ya que es un sistema agnóstico en cuanto a armamento. Esto significa que puede disparar una variedad de torpedos ligeros estándar compatibles con la OTAN, como los Mk44, Mk46 y Mk54 de EE. UU., el Sting Ray del Reino Unido, el A244S de Italia, el MU90 de Francia y el Blue Shark de Corea del Sur. Este sistema está diseñado para operaciones de corto alcance y reacción rápida, lo que lo convierte en una herramienta clave en misiones de alta exigencia.
Una de las características destacadas del TLS es su diseño modular único, que le confiere una notable flexibilidad. Este sistema puede configurarse para integrarse en módulos de misión contenidos, si así se requiere, y tiene la capacidad de adaptarse al uso de diferentes tipos de armas de forma individual. Esta versatilidad no solo reduce el riesgo de obsolescencia tecnológica derivada de las limitaciones en el suministro de municiones, sino que también garantiza que el sistema siga siendo una inversión rentable a largo plazo para los usuarios finales.
Neil Herbert, vicepresidente de Cuentas Estratégicas para América Latina en SEA, destacó la importancia de este contrato: "Este acuerdo marca un avance significativo en nuestra meta de ofrecer lo mejor de la tecnología de la industria a las marinas de todo el mundo. Además, pone de manifiesto la fiabilidad de nuestro Sistema de Lanzatorpedos y el valor de las capacidades de defensa agnósticas en cuanto a armamento para las marinas internacionales. El TLS ofrecerá a los usuarios finales control sobre su cadena de suministro de municiones, lo que ayudará a preparar las fragatas para los desarrollos futuros de armamento".
Este contrato refuerza la posición de SEA como un actor clave en el sector de la defensa naval, destacando la confianza de marinas globales en sus soluciones tecnológicas avanzadas y asegurando una relación sólida con socios y clientes en América Latina.
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