El Gobierno de Rusia ha aprobado un proyecto de acuerdo intergubernamental con Nicaragua para fortalecer la cooperación militar entre ambos países. Este acuerdo, impulsado por el Ministerio de Defensa ruso y coordinado con el Ministerio de Exteriores, busca establecer una alianza a largo plazo, según informó el portal legal del Estado ruso.
El convenio estipula intercambios de información y experiencias sobre doctrinas militares, así como la coordinación frente a amenazas globales y regionales. También propone la creación de un grupo de trabajo conjunto para dirigir esta cooperación, que incluirá actividades en foros internacionales de seguridad.
El acuerdo tendrá una vigencia inicial de cinco años, con renovación automática por períodos similares salvo que alguna de las partes manifieste, con seis meses de anticipación, su intención de retirarse.
Rusia y Nicaragua mantienen una relación de cooperación desde los años del primer gobierno sandinista (1979-1990), cuando la entonces Unión Soviética proveyó armas al país centroamericano. Esta alianza ha evolucionado en las últimas décadas con apoyo político y militar, consolidándose en el actual régimen de Daniel Ortega.
Sin embargo, informes recientes señalan que esta relación incluye actividades de inteligencia que han generado preocupación internacional. Según investigaciones del medio Confidencial, una base militar en el Cerro Mokorón, al sur de Managua, se ha convertido en un centro de espionaje operado por Rusia.
El reportaje "Centro de espionaje ruso opera en base militar de Mokorón en Managua" detalla que los equipos instalados en esta base son manejados exclusivamente por funcionarios rusos, mientras las fuerzas nicaragüenses brindan seguridad perimetral. Estos sistemas utilizan radiogoniometría para localizar señales en el espectro radioeléctrico, lo que forma parte de la estrategia nacional de defensa.
Desde 2017, Rusia habría instalado antenas y equipos de vigilancia en varias bases militares nicaragüenses. Este despliegue tecnológico se enmarca en una estrategia regional más amplia que incluye a Venezuela y Cuba, según un informe del Instituto Jack D. Gordon de Políticas Públicas de la Universidad Internacional de Florida.
El investigador Douglas Farah señala que Rusia ha proporcionado tecnología de vigilancia que respalda a regímenes autoritarios en la región y podría estar vinculada a actividades de actores no estatales que amenazan la seguridad de Estados Unidos.
Mientras Rusia refuerza su cooperación militar con Nicaragua, las denuncias sobre espionaje y acceso a información sensible en América Latina plantean interrogantes sobre los objetivos estratégicos del Kremlin en la región. El vínculo entre ambos países, con raíces históricas y complejidades actuales, continúa siendo un foco de atención en el ámbito de la seguridad internacional.
Rusia aprobó un acuerdo de cooperación militar con Nicaragua |