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El gobierno de Gustavo Petro está en una fase avanzada de toma de decisiones para renovar la flota de aviones de combate de la Fuerza Aérea Colombiana, la cual está compuesta actualmente por los envejecidos cazabombarderos Kfir COA de fabricación israelí que enfrentan dificultades para su operación debido a la falta de repuestos, lo que ha dejado gran parte de la flota en tierra. 

Entre las opciones que Colombia está evaluando para reemplazar los aviones Kfir encuentran propuestas de Suecia, Italia, Francia y Estados Unidos. Según reveló el periodista Ricardo Ospina, director del servicio informativo de Blu Radio, el gobierno de los Estados Unidos ha presentado una propuesta de aviones de combate F-16 de segunda mano que se ajustaría al estricto presupuesto del estado colombiano.

Recientemente, ese medio de comunicación obtuvo detalles específicos sobre las conversaciones que el gobierno del presidente Gustavo Petro ha mantenido con representantes del gobierno de Estados Unidos, quienes están ultimando los detalles de una oferta oficial para la venta de aviones F-16 de segunda mano.

Estos aviones de la versión F-16 A/B Block 20 están actualmente operando con Real Fuerza Aérea Jordana y han recibido la actualización Mid-Life Upgrade (MLU), que mejora significativamente sus capacidades operativas.

La propuesta que Estados Unidos planea oficializar en la próxima semana incluye la compra inicial de ocho aviones F-16 usados, por un valor estimado de 45 millones de dólares. Además, el paquete contempla un conjunto de mejoras y servicios asociados, que incluyen la actualización de las aeronaves, entrenamiento para los pilotos colombianos, repuestos, soporte logístico, simuladores de alta tecnología, mantenimiento, equipos de precisión y sistemas de apoyo en tierra. 

En total, el costo del paquete ascendería a unos 600 millones de dólares, equivalentes a aproximadamente 2,5 billones de pesos colombianos. Este costo resultaría elevado para una modernización sencilla, por lo que se presume que los ocho F-16 jordanos ofrecidos a Colombia, serían sometidos a una modernización mayor que los llevaría al estándar F-16V.

Según BluRadio, un aspecto destacado de la oferta de Estados Unidos es la promesa del país norteamericano de donar 24 aviones F-16 adicionales a Colombia en un plazo de entre cinco a diez años, si la compra inicial se concreta. 

Esto se debe a que Estados Unidos está en proceso de modernizar su flota por aviones de combate sigilososF-35, por lo que las versiones más antiguas de los F-16 C/D Block 30 y 40 estarían disponibles en grandes cantidades para ser donadas a terceros países. Además, se ha propuesto la creación de un centro logístico de entrenamiento y mantenimiento para los F-16 en la base de Palanquero, una de las principales instalaciones de la Fuerza Aérea Colombiana.

Los F-16 A/B Block 20MLU que están siendo considerados para Colombia son aviones de segunda mano procedentes de la Real Fuerza Aérea de Jordania. Estos cazas han sido una pieza clave en la defensa aérea del país árabe desde su introducción en 1997. 

Estos veteranos aviones serían llevados al estándar F-16V, una variante mejorada del venerable F-16 Fighting Falcon, que representa la última evolución de estos cazas probados en combate. Introducido por Lockheed Martin, el F-16V presenta avances significativos sobre sus predecesores, incluyendo el radar AN/APG-83 Scalable Agile Beam Radar (SABR), un computador de misión mejorado y mejoras en la cabina que aumentan significativamente la conciencia situacional, la capacidad de enganchar blancos y las capacidades de guerra electrónica del avión.

El F-16V fue presentado oficialmente en 2012, con las primeras unidades entrando en servicio a mediados de la década de 2010. Fue desarrollado para modernizar las flotas existentes y como una opción para aviones de nueva producción. Países como Taiwán y Grecia han elegido actualizar sus flotas existentes de F-16 a la variante 'V'. Taiwán comenzó a recibir nuevos F-16V en 2020, con el objetivo de reforzar sus capacidades de defensa en medio de tensiones regionales con China.

En términos de capacidades, el F-16V está equipado con aviónica avanzada y sistemas de armas que le permiten realizar una variedad de misiones, incluyendo combate aire-aire, ataque a tierra y misiones multirrol. El avión puede armarse con una amplia gama de armas, incluyendo misiles AIM-9 Sidewinder, AIM-120 AMRAAM, municiones aire-tierra y un cañón interno. Estas mejoras aseguran que el F-16V siga siendo una plataforma formidable en la guerra aérea moderna, manteniendo su relevancia frente a amenazas en evolución.

Además de las capacidades del avión seleccionado, la administración de Gustavo Petro ha sido clara en sus intenciones de maximizar los beneficios para el país en esta negociación, más allá de la simple adquisición de aeronaves. Como parte del acuerdo, se están buscando contraprestaciones (offset) que incluyan no solo transferencia tecnológica, sino también beneficios sociales para la población colombiana. Esto podría traducirse en recursos para la mejora de hospitales y la infraestructura social en distintas regiones del país, un aspecto que el gobierno considera fundamental.

La decisión final sobre la compra de los nuevos aviones de combate determinará el rumbo de la Fuerza Aérea Colombiana en los próximos años, buscando mantener una capacidad operativa eficiente y moderna en un contexto regional cada vez más complejo. 

La propuesta estadounidense, con su combinación de transferencia de tecnología, donaciones futuras y beneficios sociales, se perfila como una de las más atractivas en la actual competencia internacional por equipar a Colombia con una nueva flota de aviones de combate.
EEUU ofrece a Colombia ocho cazas F-16 A/B Block 20 modernizados al estándar F-16V por 600 millones de dólares
EEUU ofrece a Colombia ocho cazas F-16 A/B Block 20 modernizados al estándar F-16V por 600 millones de dólares
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