Serbia comprará a Francia 12 aviones de combate Rafale por 2.700 millones de euros, según un acuerdo firmado este jueves 28 de agosto en Belgrado, durante una visita del presidente, Emmanuel Macron. “Es un acuerdo histórico, y es muy importante”, declaró Macron en rueda de prensa tras reunirse con su homólogo serbio, Aleksandar Vucic.
Este acuerdo, ampliamente anticipado, permitirá a Serbia recibir nueve aviones monoplaza y tres biplaza para el año 2029, según informó Eric Trappier, director ejecutivo de Dassault.
Al resaltar la importancia que otorga París a Serbia en el mapa de la seguridad europea, el mandatario francés habló de “una apertura, un cambio estratégico”, al tiempo que recordó las buenas relaciones que Belgrado ya mantiene con Rusia y China.
Por su parte, Vucic tildó de “gran noticia” el acuerdo de compraventa, que “incluye todo el paquete logístico”, ya que “por primera vez en la historia cazas occidentales vigilarán el cielo serbio”.
“El valor total es de 2.700 millones de euros (unos 2.427 millones de dólares). Son 12 nuevos aviones que serán propiedad de Serbia y que contribuirán de forma significativa a la mejora de las capacidades operativas de nuestro Ejército”, declaró el presidente serbio. Precisó que su país pagará ya este año 421 millones de euros y otros tantos en 2025.
Por otro lado, Vucic afirmó que Serbia no va a cambiar su postura de no sumarse a las sanciones occidentales impuestas por la Unión Europea (UE) a Rusia por su invasión de Ucrania, pero insistió en que Serbia apoya la integridad territorial de Ucrania.
Este acuerdo es significativo dado que Serbia ha mantenido históricamente relaciones cercanas con Rusia y China, de quienes ha comprado armas en los últimos años, además de contar con el respaldo diplomático de ambos países en su disputa con Kosovo.
El Rafale es un caza polivalente capaz de realizar diversas misiones, desde la caza de aviones enemigos hasta ataques a objetivos terrestres y marítimos, además de misiones de reconocimiento.
Este acuerdo para la compra de aviones de combate marca el último movimiento en una serie de iniciativas que han visto a Serbia buscar lazos más estrechos con Europa. En julio, la Unión Europea y Serbia firmaron un acuerdo para desarrollar el suministro de litio en el país, visto como un elemento crucial para lograr la transición de Europa hacia una economía verde.
Este verano, Belgrado restableció las licencias para una controversial mina de litio después de haber revocado permisos otorgados al gigante minero Rio Tinto, en medio de manifestaciones por preocupaciones ambientales.
Vucic también ha reconocido que Serbia ha vendido cientos de millones de euros en municiones a países occidentales, que probablemente han sido enviadas a Ucrania para ayudar en su lucha contra la invasión de las tropas rusas. Estas ventas se producen a pesar de que Serbia se ha mantenido como un caso atípico en Europa al negarse a unirse a las sanciones contra Rusia tras su invasión de Ucrania en 2022.
Serbia es candidata a unirse a la Unión Europea desde 2012, pero sus perspectivas se ven sombrías sin una normalización de relaciones con Kosovo, donde libró una guerra contra insurgentes albaneses étnicos a finales de la década de 1990. En una carta publicada por la prensa serbia, Macron afirmó que Serbia "pertenece plenamente" a la UE.
Serbia compró 12 aviones de combate Dassault Rafale a Francia por 2700 millones de euros |