Rumania está preparada para adquirir avanzados cazas F-35 de Estados Unidos. El Ministro de Defensa, Angel Tilvar, anunció el 16 de julio de 2024 los planes para firmar un acuerdo intergubernamental este otoño para la adquisición de 32 de estos avanzados aviones de Lockheed Martin, con un costo estimado de 6.500 millones de dólares. El contrato incluirá no solo los aviones, sino también servicios logísticos completos, capacitación, simuladores de vuelo y municiones.
El F-35A Lightning II, la variante de despegue y aterrizaje convencional (CTOL) del F-35, es un caza furtivo multirrol de quinta generación desarrollado por Lockheed Martin para las fuerzas aéreas de Estados Unidos y sus aliados. El F-35A voló por primera vez el 15 de diciembre de 2006 y entró en servicio con la Fuerza Aérea de los Estados Unidos en agosto de 2016. Hasta 2024, se han producido y entregado cientos de F-35A, con planes para miles más entre socios internacionales y de EE. UU. La producción principal se lleva a cabo en la instalación de Lockheed Martin en Fort Worth, Texas, respaldada por una cadena de suministro global que contribuye con partes y ensamblajes.
El F-35A combina capacidades furtivas avanzadas con la última tecnología de aviónica y sensores, lo que le permite operar en entornos de alta amenaza que los cazas más antiguos no pueden sobrevivir. Cuenta con un radar AESA, capacidades avanzadas de guerra electrónica para detectar y bloquear radares y comunicaciones enemigas, y una red de datos de alta velocidad que incluye el Enlace de Datos Avanzado Multifuncional (MADL). El avión está diseñado para una amplia gama de misiones, incluyendo superioridad aérea, ataque terrestre y reconocimiento. Su bahía interna de armas contribuye a su perfil furtivo, capaz de llevar una mezcla de misiles aire-aire, misiles aire-tierra y bombas inteligentes. El F-35A también recibe continuamente actualizaciones de software para mejorar sus capacidades y adaptarse a amenazas emergentes.
Miembro de la OTAN desde 2004 y también miembro de la Unión Europea, Rumania está ansiosa por modernizar su hardware militar en medio de crecientes tensiones regionales. La nación, que comparte una frontera de 650 kilómetros con Ucrania, ha experimentado varios incidentes de seguridad, incluidos fragmentos perdidos de drones rusos mientras Moscú continúa su asalto a los puertos ucranianos a lo largo del río Danubio. En respuesta al conflicto en curso, Rumania anunció en junio su compromiso de donar un sistema de defensa aérea Patriot a Ucrania, como parte de un apoyo más amplio de la OTAN que incluye cinco de estos sistemas y otras unidades estratégicas de defensa aérea.
La adquisición de los cazas F-35 es parte de la estrategia de defensa a largo plazo de Rumania. La primera entrega de estos aviones no se espera antes de 2030. Mientras tanto, Rumania ha mejorado sus capacidades aéreas integrando 32 cazas F-16 de segunda mano de Noruega, sumándose a los 17 adquiridos de Portugal desde 2016. Estas medidas subrayan el esfuerzo de Rumania por mantener una postura de defensa robusta en una región marcada por la inestabilidad. Desde 2022, Rumania ha mostrado interés en adquirir F-35A, y un plan de adquisición de 6.500 millones de dólares ya se había anunciado en noviembre de 2023.
Esta compra marca un hito histórico para Rumania, ya que representa el mayor contrato de defensa en la historia del país. El Ministro de Defensa confirmó que se había enviado una Carta de Solicitud a Washington en septiembre del año anterior, iniciando el proceso de adquisición de los aviones F-35A. La respuesta de Estados Unidos delineará el marco para el próximo contrato, preparando el escenario para una mejora significativa en las capacidades de combate aéreo de Rumania.
Rumania firmará la compra de 32 cazas stealth F-35A en los próximos meses |