El Presidente, Gustavo Petro, presentó este viernes la nueva cúpula, de la que aseguró “va a dirigir la Fuerza Pública de Colombia, con los objetivos de la Política de Seguridad Humana que prometimos y que queremos volver práctica y evaluar cuando toque, para saber de su eficacia en términos de garantizar paz, garantizar la disminución de la violencia, de la criminalidad, de garantizar el incremento sustancial del respeto a los Derechos Humanos y las libertades ciudadanas, como en toda democracia debe ser”.
En rueda de prensa, acompañado por el Ministro de Defensa, Iván Velásquez, Petro anunció que el Comandante General de las Fuerzas Militares es el mayor general Helder Fernan Giraldo Bonilla; el Jefe de Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Militares, el vicealmirante José Joaquín Amézquita García; el Comandante del Ejército Nacional, el mayor general Luis Mauricio Ospina Gutiérrez; el Comandante de la Armada Nacional, el vicealmirante Francisco Hernando Cubides Granados; el Segundo Comandante del Ejército Nacional, el mayor general Jairo Alejandro Fuentes Sandoval; el Comandante de la Fuerza Aérea Colombiana, el mayor general Luis Carlos Córdoba Avendaño; el Segundo Comandante de la Fuerza Aérea, el mayor general Carlos Fernando Silva Rueda; el Director General de la Policía, el mayor general Henry Armando Sanabria Cely, y como Subdirectora General de la Policía Nacional, la brigadier general Yackeline Navarro Ordóñez.
Luego de presentar a los oficiales, dijo que esta cúpula “queda a disposición de la sociedad colombiana, queda a disposición de la paz y respeto de los derechos y las libertades de toda la ciudadanía”.
La elección de la nueva cúpula militar significaría que por lo menos 40 generales de las Fuerzas Armadas deben pasar al retiro por temas de antigüedad. Los oficiales de insignia que tendrán que retirarse del servicio activo serán 24 de la Policía Nacional, 16 del Ejército Nacional, aproximadamente seis de la Fuerza Aérea Colombiana y un numero similar de almirantes de la Armada Nacional.
Esto significaría la barrida más grande que se ha dado en la historia de las Fuerzas Armadas, que solo tenía como precedente cuando en 2007 el entonces presidente Álvaro Uribe retiró a once generales para el ascenso del general Óscar Naranjo.
Sobre este hecho en particular, Petro declaró que "En esta toma de decisiones siempre hay grados de injusticia. No voy a decir que son decisiones perfectas. Siempre hay grados de injusticia. Y yo tengo que agradecerles a todas las personas que salen sus servicios por estas decisiones por su labor su vida dedicada".
El Presidente Petro aseguró que para la escogencia de la cúpula “no miramos pensamientos políticos ni nada por el estilo” y dijo: “Nos interesa es que esta Fuerza Pública sea profesional, profesional en todo el sentido de la palabra. Que pueda valorar a sus hombres, a sus mujeres de base”.
Manifestó, además, que “queremos una política de dignificación y de mejoría de la calidad de vida de las familias de los soldados, de los agentes de Policía de la base. Mantengo mi tesis, ya veremos para llevarla a la práctica, de que no haya una barrera, como hoy existe, casi que infranqueable entre el mundo de los suboficiales y los oficiales y las oficiales”.
“Un Ejército, una Fuerza Pública en general más democrática, en donde el mérito sea el criterio de ascenso desde la base hasta el generalato, y la educación sea el factor clave para la profesionalización de toda la Fuerza Pública”, añadió.
Habló de desarrollar las capacidades industriales y comerciales de la Fuerza Pública, “que ha sido clave en otros países para el desarrollo de las economías; solo por ponerles un ejemplo: Japón empezó a industrializarse fue a partir de su Fuerza, de su Ejército, de su Armada, hasta llegar a ser una potencia, y Estados Unidos, también”.
Más de 40 generales saldrán de las Fuerzas Armadas de Colombia tras designación de la nueva cúpula militar. |