Gustavo Petro lleva apenas 3 días como presidente electo y ya le envió una solicitud al actual primer mandatario, Iván Duque Márquez, de suspender la compra de nuevos aviones para las instituciones públicas.
A través de su cuenta de Twitter, el izquierdista Petro dijo este miércoles –22 de junio– que las aeronaves (sin especificar de qué tipo) que se compren durante las próximas semanas, serán vendidas nuevamente.
“Todo avión que se compre para instituciones públicas en estas semanas, se vuelve a vender. Le solicito al presidente Duque suspender esas compras”, afirmó vehemente Petro en su cuenta de la red social.
El presidente saliente todavía no responde a las palabras de su sucesor, con quien tiene una reunión programada este jueves 23 de junio para iniciar el proceso de empalme.
El presidente electo no dio más detalles sobre qué tipos de aviones se trataba y cuales eran las instituciones públicas que iban a realizar la adquisición, lo cual deja un abanico de posibilidades muy grande sobre cual es el tipo de proyecto de compra que puede verse afectado con el nuevo gobierno.
Cabe recordar que la Fuerza Aérea Colombiana adelanta desde hace varios años un programa para adquirir una flota de aviones de superioridad aérea, cazas ligeros (LIFT), así como otras iniciativas para reemplazar viejos aviones de carga y los aviones de transporte ejecutivo Fokker F28 'Fellowship' que sirven a la Presidencia de la República y al Ministerio de Defensa Nacional. De igual manera, la Policía Nacional de Colombia adelanta una compra de aviones de transporte que de acuerdo a sus estudios es necesaria para garantizar la movilidad aérea y el despliegue de unidades en todo el país.
Es muy probable que las palabras de Petro estén enfocadas en estos dos últimos proyectos, que han estado en boca de la opinión pública nacional durante las últimas semanas, debido a pedidos de generalizados de austeridad por parte de la ciudadanía que no conoce el trasfondo y los fundamentos que podrían hacer necesaria estas adquisiciones.
El primero de ellos fue la fallida compra del avión presidencial de Ecuador, un Embraer Legacy EMB-135 BJ, por parte de la Fuerza Aérea Colombiana para reemplazar uno de los veteranos Fokker F28 conocidos popularmente como "las cafeteras".
El avión especializado en transporte ejecutivo (también conocido como VIP) fue ofrecido a Colombia por el Gobierno Ecuatoriano por una suma de 8 millones de dólares (32.286 millones de pesos), la cual estuvo a punto de girarse, de no ser por el escándalo suscitado en medios de comunicación y redes sociales.
Ante esto, el anterior comandante de la Fuerza Aérea Colombiana, General Ramsés Rueda declaró que “Es prioritario porque la Fuerza Aérea tiene una responsabilidad no solo de movilizar tropas, sino de movilizar personal (...) Nuestro objetivo es comprar el avión, no para ponerlo al servicio de Presidencia, sino para reemplazar uno de los aviones Fokker (...) Nosotros nos hemos hecho el pago, no hemos concretado. El acuerdo sobre el precio está, pero el acuerdo de la compra no”, respondió al ser cuestionado por las razones que tendría la institución para hacer esta compra.
El Presidente de Colombia, Iván Duque Márquez, le salió al paso a la fuerte polémica generada en el país sobre la próxima compra que tenía presupuestada la Fuerza Aérea Colombiana para adquirir el avión presidencial de Ecuador, un Embraer Legacy 600 avaluado en 8 millones de dólares. El mandatario de manera tajante descartó la adquisición del aparato argumentando que: “No se ha finiquitado el negocio y durante mi gobierno no vamos a comprar el avión. Eso le toca al próximo gobierno”.
Iván Duque, al ser cuestionado por dicha compra, manifestó que será el próximo presidente de Colombia quien tome la decisión sobre la adquisición de aviones.
“Colombia ha tenido conversaciones con el Ecuador sobre un avión que ellos tienen a disponibilidad, pero quiero ser enfático en esto, no se ha finiquitado ninguna negociación, no se ha pagado ningún avión y no se va a comprar ningún ningún avión durante mi gobierno” declaró.
El jefe de Estado agregó que: “Es una decisión que queremos dejar allanados los estudios y las opciones y que sea el próximo gobierno el que tome la decisión”.
“Dicho eso, es absolutamente claro que aviones que tiene más de 40 años para ese tipo de servicios representan un riesgo y ese riesgo se hace inminente a partir del año 2023, me parece preciso dejar los estudios y los análisis y que sea el próximo gobierno el que tome la decisión”, enfatizó.
El presidente también se refirió a las condiciones de la flota actual de transporte ejecutivo VIP de la FAC: “El país tiene aviones que ya son aviones muy viejos y que van a salir de funcionamiento muy pronto, seguir operando más allá del tiempo prudente los aviones es exponer a personas que viajen en ellos a una tragedia”.
Otro de los negocios que estarían en la mira de Petro es la adquisición de seis aviones para la Aviación de la Policía de Colombia, proyecto al cual le fue asignado recursos de inversión por aproximadamente 200.000 millones de pesos (unos 53,3 millones de dólares).
En dicho proyecto, la Policía Nacional de Colombia está en proceso de adquirir tres aviones de transporte Embraer de los modelos Legacy 600 (de transporte VIP), EMB-140 y EMB-145, dos aviones ATR-42 y un Cessna Grand Caravan que serían vinculados a la flota de aeronaves del Área de Aviación Policial en los próximos meses.
La adquisición de estas aeronaves ejecutivas se produce bajo el marco del proyecto de inversión titulado "Fortalecimiento de las Misiones Aéreas" que tiene como objeto el crecimiento sostenible de su aviación, aumentando así su componente de transporte aéreo y garantizando de paso, la cobertura de la acción policial en todo el territorio nacional
Según documentos oficiales obtenidos por Webinfomil.com, este proyecto tiene como objetivo general "Enfocar los esfuerzos institucionales que permiten el crecimiento sostenible de la Aviación Policial, con el fin de aumentar la capacidad operacional, fortalecer y actualizar el componente de transporte aéreo, así como garantizar la cobertura en el territorio nacional del servicio de policía en todas las modalidades y especialidades".
"Además se pretende garantizar la oportunidad de inmediatez del servicio de policía en todo el territorio nacional, reducir de manera progresiva el número de líneas [tipos de aviones], con un desmonte gradual de aquellas que generan elevados costos en el componente de aviación sin afectar la capacidad instalada que posee la institución y su nivel de respuesta antes eventuales acontecimientos del orden nacional, y aumentar la capacidad de mantenimiento y soporte técnico mejorando de paralelamente la cadena de abastecimientos" indica la institución en el resumen ejecutivo del proyecto de inversión.
La Policía justificó estas adquisiciones asegurando que “No estamos hablando de lujo, sino de capacidad, la Policía no tiene aviones VIP ni asigna aviones a dignatarios, es para la Policía en su operatividad”, explicó el General Hoover Penilla, subdirector general de la Policía Nacional.
“La recomendación era necesariamente adquirir aeronaves con mayores capacidades en el tema de turbina, que darían mayor agilidad, capacidad y rapidez en poder trasladar equipos especiales como los de inteligencia”, dijo el alto oficial
Asimismo, el general Penilla argumentó que la compra de los aviones se hizo con el objetivo de mejorar las operaciones especiales de alto riesgo, teniendo en cuenta que el tiempo y el funcionamiento de las máquinas es esencial.
Petro le corta el vuelo a la compra de aviones para las Fuerzas Armadas; le pidió al Presidente Duque no adquirirlos. |