Una delegación de oficiales de la Fuerza Aérea Argentina (FAA) visitó la Corporación Nacional de Importación y Exportación de Tecnología Aeronáutica (CATIC) de China para evaluar más a fondo los aviones JF-17 Thunder ante una posible compra por parte del gobierno argentino.
Luego de una cuarentena de 28 días como parte de las políticas Zero-COVID del país asiático, los pilotos y técnicos de la FAA realizaron una evaluación general del modelo que consistió en vuelos de prueba y prácticas con simuladores.
A principios de este mes, el jefe de personal de la FAA, General Xavier Isaac, dijo a los periodistas que la idea era adquirir al menos 12 cazabombarderos para recuperar la aviación estratégica de la Fuerza Aérea Argentina. Esta inversión se da en el marco de renovación y actualización del programa de Defensa, donde se incorporarán nuevas naves y sistemas modernizados.
Cabe destacar que la aviación militar argentina carece de una flota de aviones supersónicos desde que, en 2015, la Fuerza Aérea dio de baja los últimos cinco cazas Mirage que estuvieron operativos tras 42 años de servicio.
Son cinco los modelos de aviones que el Ministerio de Defensa estudia en una posible compra para la desnutrida Fuerza Aérea: el Kfir israelí, el F-16 producido por Lockheed Martin, el MiG-35 de Rusia, el HAL Tejas de la India y el JF-17 Thunder fabricado por una sociedad chino paquistaní.
De acuerdo a fuentes al interior de la FAA, dos opciones parecieran ser las favoritas: el avión de fabricación estadounidense y el caza mediano chino.
Además de los aviones chinos, la Fuerza Aérea Argentina está estudiando la compra de aviones de segunda mano que han sido ofrecidos por Dinamarca. Probablemente dentro de poco la delegación argentina se dirija al país nórdico para evaluar las características técnicas de una docena de F-16A/B MLU ofrecidos, que la Real Fuerza Aérea Danesa (RDAF) esta reemplazando por F-35 Lightning II.
A pesar de esta oferta, Argentina ya ha venido dando pistas sobre su predilección por la opción china. El 15 de septiembre del 2021, el gobierno argentino publicó su proyecto de presupuesto para el año fiscal 2022, donde figuraba un pedido para tomar deuda por 664 millones de dólares para la adquisición de cazas, específicamente el JF-17 Thunder Block III.
La noticia, que causó gran revuelo en el país sudamericano, fue aclarada por Gobierno Argentino asegurando que no se había llegado a una decisión definitiva sobre el nuevo modelo de avión de combate a incorporar, y que se seguía evaluando a cinco posibles candidatos.
Al término de la visita, la delegación de la FAA fue recibida por el Embajador argentino en la República Popular China, Sabino Vaca Narvaja, junto al agregado militar, General Norberto Zárate.
La oficina de Vaca Narvaja explicó que la cooperación en defensa con China no se limita a la posible adquisición de JF-17 y que puede incluir otros temas, como vehículos blindados de combate (VCBR) para el Ejército argentino.
El ministro de Defensa, Jorge Taiana, ya se ha reunido con dignatarios de Norinco, la empresa china que ha sugerido la provisión de estas unidades, además de la posibilidad de ensamblar y coproducir el VCBR VN-1D y la transferencia de tecnología que supondría montar un fábrica con esas capacidades en Argentina.
El JF-17 Thunder es un avión de combate mediano que tiene un rendimiento suficiente para llevar a cabo la misión de combate del interceptor. Puede alcanzar velocidades de hasta Mach 1,6 y tiene un radio de combate de hasta 1.352 km.
El caza tiene siete puntos duros que pueden recibir desde misiles aire-aire guiados por infrarrojos y radar, armamento aire-tierra, anti-buque, así como bombas y cañones. Actualmente, el JF-17 es operado por Pakistán (138 cazas), Myanmar (16 en pedido) y Nigeria, que recibió sus primeros tres aviones en 2021.
Argentina tenía una flota de combate respetable, pero la Fuerza Aérea retiró su flota supersónica ante la incapaz de reponer las pérdidas en el inventario debido a la falta de recursos financieros suficientes y la dificultad para conseguir repuestos. Actualmente, la defensa aérea de Argentina utiliza solo seis aviones McDonnell Douglas A-4 Skyhawk adaptados para este tipo de misión.
Sin embargo, sea cual sea el avión elegido, no será una operación fácil, el financiamiento es un problema pero también la capacitación del personal, ya que los pilotos argentinos y el personal de apoyo están acostumbrados a la operación de aviones occidentales.
La Fuerza Aérea Argentina evaluó el avión de combate chino JF-17 'Thunder', de cara a una posible adquisición de 12 cazas. |