La Fuerza Aérea de los Estados Unidos (USAF) está buscando un nuevo entrenador táctico avanzado, tras emitir una solicitud de información (RFI) para al menos 100 aviones presentada el pasado 12 de octubre.
El RFI del Entrenador Táctico Avanzado (ATT) publicado en el sitio web de adquisiciones del gobierno de EE. UU. solicita un avión que pueda realizar tres funciones principales: proporcionar entrenamiento táctico inicial; proporcionar adiestramiento aire-aire y aire-tierra adversario (Red Air) y servir como sustituto de los aviones de combate tácticos existentes y futuros en el inventario de la USAF. Según la solicitud, la USAF planea comprar inicialmente al menos 100 aviones, con lotes subsiguientes de 50 aviones.
Las especificaciones requeridas emitidas por la USAF señalan que la aeronave ATT propuesta debe ser un diseño de dos asientos en tándem, con la opción de una variante de un solo asiento que permita un uso alternativo no especificado del asiento trasero, una suite de aviónica de arquitectura abierta con grandes pantallas en cabina que pueden replicar las pantallas y sistemas de aviones de primera línea, cascos inteligentes, mandos tipo HOTAS, así como pilones individuales debajo de cada ala que puedan transportar armas, tanques de combustible y sistemas de guerra electrónica.
Los atributos de rendimiento incluyen una velocidad máxima subsónica alta (Mach 0,9) a 10.000 pies, un techo de servicio de 45.000 pies, un límite estructural de +7,5 g (6 g sostenido) y una autonomía de 90 minutos (incluidos 30 minutos de maniobras tácticas).
La idea detrás del nuevo entrenador táctico es tener una plataforma de entrenamiento de bajo costo equipada con una cabina que sea representativa de un avión de combate avanzado de primera línea, como el F-35. Está impulsado por el hecho de que el actual programa T-7A , que cubre 351 aviones, se considera insuficiente para satisfacer todas las necesidades futuras de entrenamiento de reactores según lo previsto por la USAF.
El Entrenador táctico avanzado probablemente emergería con un conjunto de capacidades muy diferente en comparación con el T-7A. La Fuerza Aérea está apuntando a puntos duros externos para el transporte de armas de entrenamiento, cápsulas de guerra electrónica, cápsulas de instrumentación de maniobras de combate aéreo y tanques de combustible. Un radar compacto podría ser otra opción para el jet, y el RFI también menciona específicamente que se está considerando la instalación de un sensor de búsqueda y seguimiento por infrarrojos (IRST).
 |
| Avión T-7A Red Hawk fabricado en conjunto por Saab y Boeing. |
