Sigue la ofensiva contra el Grupo Armado Organizado-Residual ‘Guerrillas Unidas del Pacífico’ por parte de las Fuerzas Militares. En el marco de la Campaña Militar y Policial ‘Atlas’, tropas de la Fuerza de Tarea Conjunta Hércules a través de su componente Armada Nacional, logran la incautación de dos Semisumergibles en el sector de San José zona discontinua del municipio de Tumaco, Nariño.
Estos Semisumergibles tendrían la capacidad de transportar cada uno tonelada y media de clorhidrato de cocaína y hasta tres tripulantes. Así mismo, la construcción de cada uno de estos Semisumergibles tendría un valor aproximado de 1.500 millones de pesos, su fabricación artesanal le permitiría a este grupo residual trasportar alcaloides hasta la costa de Centroamérica.
Con este resultado la Fuerza de Tarea Conjunta ‘Hércules’ evita que toneladas de clorhidrato de cocaína sean transportadas y distribuidas presuntamente en Centroamérica, donde alcanzarían un valor aproximado de 90 millones de dólares. Es por ello que se seguirá con operaciones militares y policiales, contra los Grupos Armados Organizados, garantizando el orden y la seguridad en el pacífico sur nariñense.
Este hallazgo se suma a la captura de otros tres semisumergibles en el departamento del Cauca, uno de ellos fue interceptado navegando con 1.5 toneladas de clorhidrato de cocaína, y los otros dos artefactos ilegales, localizados en dos astilleros ilegales en los que eran construidos.
El primer semisumergible de 20 metros de eslora (largo), por dos metros de manga (ancho), fue interceptado cuando navegaba en el área general del municipio de Timbiquí, en Cauca, tripulado por dos ecuatorianos y un colombiano, que pretendían transportar 1.535 kilogramos de clorhidrato de cocaína hasta Centroamérica. Este duro golpe, se dio gracias al trabajo de la inteligencia naval con antiguos miembros de la Farc, que fueron requeridos para extradición por el Gobierno de los Estados Unidos, y han brindado información para obtener beneficios.
Las Unidades de la Fuerza Naval del Pacífico localizaron el artefacto construido por la subcomisión de alias “El Burro”, del Grupo Armado Organizado Residual del Frente 29 “Stiven González”, cuyo cabecilla es alias “Platanote”, desde hace más de un mes, con tropas en tierra y Unidades marítimas, que lo interceptaron navegando. Los sujetos al sentirse atrapados, abrieron las válvulas de fondo para que el semisumergible se hundiera, situación a la que el personal de la Unidad de Reacción Rápida de Guardacostas reaccionó rápidamente, para que los sujetos no fueran succionados por el artefacto ilegal.
Las Unidades de la Fuerza Naval del Pacífico localizaron el artefacto construido por la subcomisión de alias “El Burro”, del Grupo Armado Organizado Residual del Frente 29 “Stiven González”, cuyo cabecilla es alias “Platanote”, desde hace más de un mes, con tropas en tierra y Unidades marítimas, que lo interceptaron navegando. Los sujetos al sentirse atrapados, abrieron las válvulas de fondo para que el semisumergible se hundiera, situación a la que el personal de la Unidad de Reacción Rápida de Guardacostas reaccionó rápidamente, para que los sujetos no fueran succionados por el artefacto ilegal.
Ante el hundimiento del semisumergible, la Fuerza Naval del Pacífico planeó la operación que le permitió reflotarlo y para ello destinó un buque de desembarco anfibio, ya que esta Unidad es configurada como soporte hiperbárico, plataforma de buceo, apoyo logístico y maniobra de salvamento, por la capacidad de su grúa; una Unidad tipo Pilot de la Dirección General Marítima, así como Unidades de Guardacostas. Durante la operación de reflote del semisumergible, que duró aproximadamente 10 días, se combinaron las diferentes capacidades de la Armada de Colombia para esta operación de buceo y salvamento.
De manera simultánea, en el área general del municipio de López de Micay en Cauca fueron localizados dos semisumergibles de bajo perfil, que eran construidos en astilleros ilegales. Uno de los artefactos medía 17 metros de eslora (largo) y cuatro metros de manga (ancho), el otro tenía 20 metros de eslora (largo) y cuatro metros de manga (ancho), con capacidad para transportar hasta dos toneladas y media de alcaloides, cada uno.
La extensión de los astilleros ilegales y las diferentes infraestructuras de madera, superaban los 200 metros, siendo considerada como una de las áreas más grandes localizadas por la Armada de Colombia hasta el momento, en el Pacífico colombiano. En su interior, además se encontró una infraestructura rudimentaria tipo campamento, que tenía la capacidad para albergar hasta 15 delincuentes. Así mismo, fue localizada una lancha tipo corvina con motor, 80 canecas con residuos de sustancias para la fabricación de estas embarcaciones y radios de comunicación. Durante la operación no se presentaron capturas.
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