La Marina de Brasil inició el pasado 20 de febrero la fase de integración del primero de los cuatro submarinos convencionales Scorpene de la Clase Riachuelo, previstos en el ámbito del Programa de Desarrollo de Submarinos (PROSUB), uno de los mayores proyectos tecnológicos en marcha en el país sudamericano.
Esta nueva fase del programa PROSUB se realizará en el Complejo Naval de Itaguaí, y comprende el montaje final del Riachuelo, el primero de los submarinos convencionales del programa. Es así que en las próximas semanas se unirán todas las secciones que forman el casco y los múltiples sistemas que ya se encuentran instalados en cada una de ellas. Esta fase, de alta sofisticación tecnológica, es la última, antes del lanzamiento del submarino al mar, previsto para el segundo semestre de este año.
El PROSUB prevé, además de la construcción de los cuatro submarinos convencionales, el proyecto y la construcción del primer submarino brasileño con propulsión nuclear y la infraestructura necesaria para la construcción, operación y mantenimiento de ambos modelos.
El programa cuenta con fuerte participación de universidades y centros de investigación, lo que genera, entre otros beneficios, transferencia de tecnología, desarrollo propio de tecnologías, procesos y materiales avanzados, fomento al desarrollo de la base industrial brasileña de defensa, capacitación de profesionales en actividades altamente especializados y miles de empleos directos e indirectos.
Los submarinos Scorpene están diseñados para lanzar torpedos de distintos tipos, contramedidas, minas y misiles de crucero. Además se le puede incorporar una propulsión independiente del aire, que le otorga una autonomía sumergido de algunas semanas en lugar de algunos días.
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