Las tripulaciones de la Fuerza Aérea Colombiana en el Meta se encuentran en máxima alerta ante la posibilidad de incendios forestales en la Orinoquía colombiana. Teniendo en cuenta el fenómeno del niño y la sequía que se ha prolongado en la temporada de fin de año, el Comando Aéreo de Combate No. 2 ordenó el máximo alistamiento a sus tripulaciones más experimentadas con el fin de contrarrestar cualquier emergencia.
“Nuestra unidad está disponible al 100 por ciento. En el menor tiempo de reacción y luego de las coordinaciones entre la Jefatura de Operaciones Aéreas y el Centro Nacional de Recuperación de Personal estaremos despegando en un tiempo máximo de 35 minutos hacia el sitio de Colombia donde sean requeridos nuestros servicios. Lo más importante es salvaguardar el bienestar de todos los colombianos y la naturaleza”, destacó el Coronel Andrés Guzmán Morales, Comandante del Comando Aéreo de Combate No. 2 (e).
La combinación de los pilotos más preparados, las capacidades del helicóptero UH-60 y el novedoso dispositivo Bambi Bucket son la herramienta más eficaz para combatir los estragos de los incendios forestales contra los ciudadanos y el medio ambiente.
Así, la Fuerza Aérea continúa desplegando sus alas para apoyar a los colombianos que más lo requieran sin importar el lugar en que se encuentren.
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