El Ejército de Colombia compró, por 32 millones de dólares, veinte obuses franceses LG1-Mark III para complementar a los M-101A1 actualmente en uso. Dichos obuses serán entregados a partir del próximo año según lo estipula el contrato firmado en el año 2008.
El obús remolcado Nexter 105 LG-1 está particularmente adaptado a fuerzas de intervención rápida que operen sobre terreno difícil. El arma es ligera, fácil de usar y es el arma ideal para ser transportada vía aérea, vía helicoportada, ser usada en operaciones anfibias y para ser lanzada en paracaídas; con eficiencia como se ha podido comprobar durante las operaciones de combate en Afganistán.
Los obuses LG-1 en sus diferentes versiones han prestado servicio en países como: Indonesia con 20 unidades pedidas en 1994, Canadá con 28 unidades pedidas en 1994, Tailandia con 20 unidades pedidas en 1995 y Bélgica con 14 unidades pedidas en 1996.
La versión Mk III del obús se destaca por sus innovaciones tecnológicas. Las piezas de 1520 kilogramos cada una vienen equipadas con un navegador inercial Kearfott Corporation KN-4051, un monitor de comando y control de la compañía Astronautics, una unidad auxiliar de energía y un dispositivo anti vibración de la compañía Dynamica. Esta versión también permite la operación de equipos tácticos de gestión como lo es el sistema Atlas de la empresa Thales Joint & Land Systems el cual también equipa los obuses Caesar de 155mm también producidos por la empresa Nexter. El obus tiene una cama estándar tipo NATO, y puede disparar toda la munición estándar de 105 mm especialmente la munición estadounidense M1 la cual le da un rango de más de 11 Km de alcance. También es compatible con la munición “Extended Range” de Nexter la cual le confiere un alcance de más de 17 Km.