En el marco del Diálogo de Alto Nivel entre Colombia y Suecia, ambas naciones reafirmaron su cooperación en seguridad y justicia con la firma de un Memorando de Entendimiento para el Cumplimiento de la Ley.
El acuerdo, suscrito por el ministro de Defensa Nacional, Iván Velásquez, la ministra de Justicia, Ángela Buitrago, y la canciller sueca, Maria Malmer Stenergard, busca fortalecer la lucha contra la delincuencia organizada transnacional mediante el intercambio de información, programas de capacitación y el desarrollo de estrategias conjuntas para enfrentar el tráfico de drogas, armas, cibercrimen, lavado de dinero y terrorismo.
El encuentro también incluyó compromisos en otras áreas, como la promoción de la igualdad económica de género y la conservación ambiental, con Suecia destinando un millón de dólares adicionales para apoyar programas de ONU Mujeres en Colombia.
Cabe destacar que la cooperación entre ambas naciones ha estado marcada por el interés en la oferta sueca de aviones de combate Saab Gripen para la modernización de la Fuerza Aérea Colombiana. Informes de medios internacionales señalaron en octubre de 2024 que Colombia habría seleccionado el Gripen como su nueva aeronave de combate, en un acuerdo que incluiría financiamiento flexible y transferencia de tecnología con participación de la brasileña Embraer en la producción.
Sin embargo, el ministro de Defensa, Iván Velásquez, desmintió que se haya tomado una decisión definitiva y aseguró que el proceso sigue en evaluación. Esta falta de confirmación mantiene en incertidumbre la renovación de la flota de aviones Kfir, que han estado en servicio en la Fuerza Aérea Colombiana por más de 30 años y cuya salida está programada en el corto plazo.
La modernización de la flota de combate es una prioridad para la Fuerza Aérea, que ha evaluado distintas opciones, incluyendo los F-16 estadounidenses y los Rafale franceses. No obstante, el gobierno de Gustavo Petro ha señalado que cualquier adquisición deberá realizarse sin comprometer las finanzas públicas a corto plazo, lo que ha ralentizado el proceso de selección.
La adquisición de una nueva flota de aviones de combate es esencial para garantizar la defensa y soberanía aérea de Colombia. No obstante, la decisión final dependerá de múltiples factores, incluyendo consideraciones técnicas, financieras y geopolíticas.
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