El Ejército Argentino ha dado un importante paso en sus esfuerzos por modernizar sus capacidades aéreas con el anuncio de una licitación para adquirir helicópteros Sikorsky UH-60 Black Hawk de segunda mano. Esta iniciativa, enmarcada en los planes de renovación de flota y mejora de las capacidades de despliegue de tropas, representa un avance significativo tras años de postergaciones en la incorporación de equipos de ala rotatoria modernos.
El proceso, identificado como número 84/7-0942-LPU24, fue publicado en el portal oficial COMPR.AR y establece la adquisición de tres helicópteros usados en condiciones aeronavegables. Según la información divulgada, los interesados tienen hasta el 13 de enero de 2025 para presentar sus propuestas, fecha en que se realizará la apertura de sobres para evaluar las ofertas.
La licitación, autorizada oficialmente en septiembre de este año, estipula que los helicópteros deben ser adquiridos a través del programa Foreign Military Sales (FMS) del gobierno de los Estados Unidos. Este requisito asegura que las aeronaves cumplan con los estándares técnicos y operativos necesarios para su integración en el Ejército Argentino. Además, se especifica que los helicópteros deben incluir todos los componentes esenciales para un uso continuado, como lotes iniciales de repuestos que permitan alcanzar al menos 960 horas de vuelo, junto con la capacitación inicial para pilotos, copilotos y tripulación técnica.
Entre las condiciones técnicas detalladas en los documentos de la licitación, se destaca que las aeronaves deben haber sido fabricadas a partir de 1990, lo que excluye versiones más antiguas como el modelo UH-60A, que ha sido entregado por Estados Unidos en forma de donaciones a otros países de la región. Según informó el medio de comunicación especializado Pucará Defensa, las aeronaves seleccionadas deben tener un mínimo de 480 horas de vuelo remanentes antes de la próxima inspección mayor, lo que asegura su operatividad en el corto plazo. Además, deben estar configuradas para operaciones tanto bajo reglas de vuelo visual (VFR) como instrumental (IFR), incluir equipos para operar con visores nocturnos (NVG) y estar equipadas con sistemas especializados como ganchos de carga, sistemas de rappel y fast-rope. También deben incorporar afustes para ametralladoras MAG calibre 7,62 mm y tener capacidad para utilizar tanques de combustible auxiliares, tanto internos como externos.
La entrega de las aeronaves está prevista en el Batallón de Abastecimiento y Mantenimiento de Aeronaves 601, ubicado en Campo de Mayo, bajo los términos Incoterm 2020 en la modalidad DAP (Delivered at Place). Este esquema implica que el adjudicatario será responsable de transportar los helicópteros hasta su destino final en condiciones operativas. El contrato también incluye un soporte técnico por un periodo de 36 meses, durante el cual se contará con un representante en Campo de Mayo para asistir en la puesta en marcha y en el sostenimiento de las aeronaves.
En cuanto a la capacitación, el programa contempla cursos iniciales para pilotos y copilotos en simuladores avanzados, mientras que el personal técnico recibirá formación en mantenimiento preventivo y correctivo. Estos cursos abordarán aspectos clave como el funcionamiento de motores, aviónica y componentes dinámicos, y se impartirán en español para facilitar el aprendizaje. Además, se establece la obligación de habilitar un taller en Argentina que cumpla con los estándares del Reglamento de Aeronavegabilidad Militar, lo que implica una transferencia tecnológica y un fortalecimiento de las capacidades locales de mantenimiento.
La adquisición de estas aeronaves tiene como objetivo ampliar las capacidades del Ejército Argentino en una amplia gama de misiones, que incluyen asalto aéreo, evacuación aeromédica, búsqueda y rescate, y apoyo en tareas civiles como la lucha contra incendios. Los helicópteros serán matriculados como AE-531, AE-532 y AE-533, integrándose a la flota de la Dirección de Aviación del Ejército con el esquema de pintura estándar de la fuerza.
A pesar del impacto positivo que podría generar esta incorporación, el número reducido de unidades, limitado a tres helicópteros, plantea desafíos significativos. Originalmente, el Ejército Argentino había proyectado la adquisición de al menos 12 aeronaves para garantizar una capacidad operativa adecuada y eficiente. Pucará Defensa apunta que la compra de solo tres unidades podría dificultar tanto la obtención de financiamiento en condiciones favorables como el desarrollo de una logística sostenible para el mantenimiento y operación de la flota. Esta problemática ya ha sido experimentada en el pasado con sistemas similares, como los AS332 Super Puma, que enfrentaron limitaciones operativas debido al reducido tamaño de su flota.
El proceso de licitación busca dotar al Ejército Argentino de una herramienta versátil y moderna que permita cumplir con las exigencias de los escenarios operativos actuales. No obstante, queda por determinar si este esfuerzo inicial logrará sentar las bases para una ampliación futura de la flota y un fortalecimiento integral de las capacidades de ala rotatoria de la fuerza. La decisión final sobre la adjudicación de este contrato marcará un punto importante en la estrategia de modernización del Ejército y en su capacidad para responder eficazmente a las necesidades de seguridad y apoyo en el ámbito nacional e internacional.
 |
| El Ejército Argentino licita la compra de helicópteros Sikorsky UH-60 Black Hawk usados |
