China ha presentado oficialmente el Shenyang J-35A, un caza furtivo que ha estado en desarrollo durante varios años, aunque solo se había visto en imágenes no oficiales y de baja calidad. El desarrollo de este caza se considera parte de la apuesta de Pekín por equipararse a las capacidades de los cazas furtivos de Estados Unidos, en su esfuerzo por modernizar sus fuerzas armadas y reafirmar su poderío militar en Asia.
La primera foto oficial del J-35A se publicó antes de su debut en la Exhibición Internacional de Aviación y Aeroespacial de China, conocida como Airshow China, que se celebra en el Aeropuerto de Zhuhai, en la provincia de Guangdong.
La imagen, que muestra el avión en una vista de tres cuartos mientras carretea, revela varios detalles nuevos y aclara aspectos previamente ocultos. También ofrece una comparación útil con versiones anteriores del J-35 y FC-31, así como con otros cazas de quinta generación.
El J-35A está “diseñado principalmente para operaciones de combate aéreo y también puede realizar ataques aire-superficie”, según un informe de un medio militar chino.
De entrar en servicio, China se convertiría en el segundo país, después de Estados Unidos, en disponer de dos tipos de cazas furtivos. El otro es el J-20 que entró en servicio en 2017. Entre julio de 2023 y este mes de junio, la Fuerza Aérea del Ejército Popular de Liberación (EPL) incorporó más de 70 J-20, con lo que la flota operativa del EPL asciende en la actualidad a aproximadamente 195 cazas furtivos.
Se han señalado similitudes entre el J-35/FC-31 y el F-35 estadounidense, lo que ha generado especulaciones sobre la posibilidad de que China haya copiado o aprovechado datos obtenidos ilegalmente del diseño norteamericano. Si bien China ha accedido a información clasificada sobre varios programas militares occidentales, incluido el F-35, esto no significa que el J-35 sea una "copia".
Aunque el diseño chino puede reflejar ciertos aspectos del F-35, emular su compleja tecnología es una tarea monumental. Existen diferencias críticas, como la configuración de motores dobles en el J-35, frente al único motor turbofán del F-35. Además, el F-35 fue diseñado desde el inicio para cumplir con capacidades de despegue y aterrizaje verticales (STOVL), una característica ausente en el J-35 chino.
A pesar de algunas similitudes en los conductos de entrada, la cabina y la configuración básica, el diseño chino es más esbelto, en parte debido a la ausencia de la necesidad de despegue vertical, lo que genera dudas sobre su capacidad de combustible y alcance, así como sobre el espacio disponible para armamento interno. Esto implica que, aunque un avión pueda parecer similar, su rendimiento puede ser completamente distinto, especialmente en lo que respecta a la tecnología de sensores, la integración de sistemas y los revestimientos furtivos.
Según informa la televisión estatal china, es probable que el J-35 también pueda utilizarse como avión embarcado en portaaviones. Esto “mejoraría enormemente la fuerza general del combate marítimo y aéreo de China”, afirmó un experto en defensa chino.
En la nueva imagen del J-35A destacan algunos detalles notables, como un sistema de adquisición de objetivos electro-óptico, similar al EOTS del F-35, montado debajo del morro, y un HUD de gran angular en la cabina. También aparece un lente de Luneburg bajo el fuselaje, diseñado para aumentar la reflectividad del radar y hacer que el avión sea menos indetectable cuando se desee.
Este nuevo caza también representa una opción más asequible y operativamente menos costosa que el J-20, lo que permitiría a la PLAAF aumentar su "masa de combate" sin incurrir en los elevados costes asociados al caza J-20. Además, la producción del J-35A ofrece un incentivo industrial al mantener a Shenyang activo en la fabricación de cazas y podría atraer pedidos de exportación de países que no pueden acceder a diseños occidentales similares.
La capacidad de exportación ha sido un eje central en el programa FC-31/J-35, con el objetivo de posicionar a China en el mercado de cazas avanzados a precios competitivos. La posible adquisición de Pakistán ayudaría a amortizar los costos de desarrollo y reduciría el precio unitario, lo cual podría consolidarse aún más si la PLAAF decide adquirir una cantidad considerable.
Por ahora, aún quedan muchas preguntas sobre el J-35A, algunas de las cuales podrían resolverse durante la Airshow China. La presentación oficial del J-35A y el interés de la PLAAF son una muestra más del rápido avance en la industria aeroespacial militar de China.
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| China presentó oficialmente su nuevo caza furtivo J-35A |
